Salomón Duque Polo en Nepal.
Salomón Duque Polo en Nepal.
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Salomón Duque Polo, bronce en Olimpiada de Astronomía y Astrofísica en Nepal

Es oriundo de Santa Lucía y con 16 años sueña trabajar para combatir el cambio climático.

Cuando Salomón José Duque Polo, de 16 años, decidió entrar al club de astronomía del IED Alexander von Humboldt hace dos años, por su mente no pasaba que iba a terminar viajando a Nepal para participar en las Olimpiadas Internacionales de Astronomía y Astrofísica.

Duque Polo, junto a su papá José y su mamá Milagros, llegó a Barranquilla en 2010, después de que la ruptura del Canal del Dique los obligara a salir de su natal, Santa Lucía, en el sur del Atlántico.

Salomón, hijo de dos abogados y quien cursa el grado 11, siempre se ha destacado como buen estudiante y su llegada al club de astronomía rápidamente lo hizo sobresalir más.

Sus cualidades en este campo le hicieron inscribirse en las Olimpiadas Nacionales, organizadas por la Universidad Antonio Nariño. Realizó pruebas virtuales, después una clasificatoria y terminó siendo elegido para los equipos senior y junior.

Salomón con otros participantes de las Olimpiadas.

Con el grupo senior tuvo la oportunidad de ir a Brasil entre el 17 y 25 de agosto, consiguiendo una mención de honor. Sin embargo, fue en Nepal, en Asia, donde consiguió un importante logro, puesto que obtuvo la medalla de bronce. 

En Katmandú, capital de Nepal, estuvo acompañado por un joven oriundo de Chía, Cundinamarca. Ambos se prepararon primero en Bogotá y después, el 1o. de octubre, partieron a Asia.

Fueron 40 horas de vuelo, que incluyeron paradas en Ámsterdam, Países Bajos, y Dubái, Emiratos Árabes Unidos. "Más que todo dormí, pero también estudié un poquito, porque uno siempre tiene la preocupación". 

Salomón en el aeropuerto El Dorado.

Cabe destacar que las Olimpiadas solo pagan la estadía, una parte de los tiquetes lo asumieron sus padres y otra la Universidad Antonio Nariño. 

"La gente es muy diferente, primero el idioma porque con todos nos teníamos que comunicar en inglés, no hablaban español", afirmó el joven a Zona Cero, destacando que Colombia era el único país participante de habla hispana. 

"Tienen costumbres demasiado diferentes, son diferentes religiones, es bastante difícil encontrar un cristiano allá", indicó.

La comida no fue un problema, ya que en el hotel donde se hospedó pudo disfrutar de lo mismo que se come en Colombia, aunque sí se aventuró a probar unos dumpling con picante propios de la cultura nepalés. "Eran fuertes, demasiado, pero me gustaron". 

Ya sobre las pruebas, Salomón explicó que estaban divididas en dos partes, una teórica y otra observacional. 

"Nosotros ya veníamos entrenando desde hace rato y creo que fue más que todo un esfuerzo autodidacta, pero también se recibía mucha ayuda de los conocimientos que uno aprende en el colegio y ahí uno logra aprender bastantes cosas y estar bastante preparado", recordó.

Salomón participando en una de las pruebas.

Salomón señaló que las pruebas teóricas eran "amplias", puesto que lo ponían a analizar la velocidad de una estrella binaria, por ejemplo.

"La de telescopios, lamentablemente, no se pudo hacer por la noche en la Olimpiada porque estaba nublado por la época. Entonces nos pusieron en un salón oscuro para ubicar objetos", expresó.

En total fueron 20 países participantes y las premiaciones tenían varios países en el podio, por ejemplo, bronce también obtuvieron Grecia y República Checa.

Diploma y medalla que recibió.

"Es muy bacano poder empezar a tener intercambios culturales con la gente desde tan temprano y también como eso lo ayuda a uno con su habilidad para hablar inglés. Desarrollé ciertas habilidades y vemos qué hay de diferente en otras culturas, por ejemplo, había un participante que nunca había visto una gallina, eso fue chévere". 

Una decisión de hace dos años le cambió la vida a Salomón. El gusto por la astrofísica y la astronomía fue creciendo con el tiempo, pero hoy marca su camino y el de su familia, puesto que sus padres han enfrentado un sueño que no es barato.

"Yo sé que ha sido duro para ellos y han sacrificado todo lo que han podido. Harían lo que fuera por mí a este punto", destacó el joven.

Aún Salomón no ha definido qué quiere estudiar, pero su deseo es trabajar por el cambio climático.

"Quiero dedicar mi vida al cambio energético y a la lucha por el cambio de las energías para solucionar el problema del cambio climático", remató.

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